¡Buenos días!
Anoche los ejemplares de Pablito no quiere nacer durmieron en mi mesilla. Aunque la publicación de mi libro ya había tenido lugar oficialmente, no había tenido ocasión de acercarme a la editorial a recoger mis copias personales.
Cuando cogí una de ellas entre las manos apenas podía creerlo. Una novela. Con mi nombre plasmado en la portada. Un sueño palpable. La sensación de acariciar algo etéreo con las yemas de los dedos...
Más tarde, ya en mi casa, quise fotografiar esa alegría. Y aunque las fotos no son demasiado buenas (de hecho, peor no podría salir), me gustaría compartir ese momento con todos/as vosotros/as:
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Y, para mi sorpresa, dos blogs han reseñado ya mi novela: Viva la... oh la lá! y Una de magia, por favor.... ¡Muchísimas gracias! Pero eso se merece otra entrada...
Un beso,
Isa
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